ESTA SEMANA SE HABLA DE LA PÍLDORA DEL DÍA DESPUÉS

En los márgenes de este blog dispones de documentación, y antes quisiera compartir contigo una carta aparecida en NOTICIAS DE ÁLAVA:

La cortina de humo de la píldora del día después
Cristina López y Jokin de Irala

La píldora del día después (PDD) se venderá sin receta y a las mujeres de cualquier edad. Las ministras de Sanidad e Igualdad, Trinidad Jiménez y Bibiana Aído, respectivamente, afirman que disminuirá el problema de los embarazos imprevistos y abortos.

Dicen que no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios, pero los datos científicos dicen lo contrario.

Este producto hormonal -cuya dosis es diez veces superior a la de los anticonceptivos orales- no está exento de efectos secundarios, algunos de ellos graves.

En la ficha técnica de la píldora, que las ministras debería conocer, se informa sobre ello y se advierte de que no está recomendado su empleo en menores de 16 años porque no hay suficientes datos científicos.

Es paradójico que el farmacéutico pueda dispensar la PDD sin receta a una niña de 15 años y no pueda darle sin receta un analgésico para la cefalea o el dolor abdominal que le ha producido dicha píldora.

Son numerosos los estudios científicos que demuestran que la PDD puede impedir la implantación de un embrión, y así se explica en la ficha técnica y el prospecto del producto.

Afirmar, como lo ha hecho la ministra de Sanidad, que no tiene efecto abortivo porque actúa antes de la implantación es desconocer los hechos biológicos de la reproducción humana.

La implantación del embrión en el útero no determina el comienzo de la vida humana, es una etapa más del desarrollo iniciado tras la concepción.

Por tanto, sobran evidencias científicas para afirmar que la libre distribución de la PDD no parece una buena estrategia de salud pública para reducir los embarazos no deseados y los abortos.
(Diario de Noticias de Álava, 14 de mayo de 2009)